Conteo de glóbulos blancos: Lo que usted necesita saber

Los glóbulos blancos, también conocidos como leucocitos, ayudan a proteger el cuerpo contra infecciones, bacterias, virus y enfermedades. Esta parte esencial del sistema inmunitario se produce en la médula ósea y está presente en la sangre y el tejido linfático. Existen glóbulos blancos (GB) de diferentes tipos y la sangre normalmente contiene un cierto porcentaje de cada uno. Esto es lo que los médicos verifican cuando solicitan pruebas que midan el conteo de glóbulos blancos de una persona.

¿Por qué los médicos revisan su conteo de glóbulos blancos?

El conteo de glóbulos blancos generalmente se incluye en una prueba que mide su conteo sanguíneo completo (CBC, por sus siglas en inglés). Un conteo bajo de glóbulos blancos o un conteo alto de glóbulos sanguíneos pueden indicar una infección o una condición no diagnosticada, como un trastorno sanguíneo, una enfermedad autoinmunitaria o una deficiencia inmunitaria. El conteo de glóbulos blancos puede ayudar a los médicos a detectar y proporcionar tratamiento para estas afecciones potenciales, así como a controlar la eficacia de la radioterapia o la quimioterapia en los pacientes de cáncer.

¿Cuál es el conteo normal de glóbulos blancos?

El conteo de glóbulos blancos de las personas puede variar según la edad. Los bebés generalmente tienen un conteo de glóbulos blancos más alto, que disminuye gradualmente a medida que envejecen. La tabla a continuación muestra los rangos normales de glóbulos blancos por microlitro de sangre (mcL).

Síntomas de un conteo anormal de glóbulos blancos

Un conteo anormal de glóbulos blancos puede ser menor o mayor que el rango normal. Los síntomas comunes de un conteo bajo de glóbulos blancos, también conocido como leucopenia, incluyen dolores corporales, escalofríos, fiebre y dolor de cabeza. Si tiene estos síntomas, programe una cita con su médico y él o ella pueden recomendar un recuento de glóbulos blancos.

Por otro lado, un conteo alto de glóbulos blancos, también conocido como leucocitosis, generalmente no causa síntomas, aunque la condición subyacente que lo está causando puede mostrar sus propios síntomas.

Factores de riesgo de un conteo anormal de glóbulos blancos

Un conteo bajo de glóbulos blancos puede desencadenarse por los siguientes factores o condiciones:

• Trastornos autoinmunitarios
• Daño o trastorno de la médula ósea
• Ciertos medicamentos (p. ej., antibióticos)
• Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH)
• Enfermedades del hígado y del bazo
• Lupus
• Linfoma
• Radioterapia
• Infecciones graves

Por otra parte, un conteo alto de glóbulos blancos puede ser desencadenado por los siguientes factores o condiciones:

• Asma
• Ciertas alergias
• Ciertas infecciones (p. ej., tuberculosis)
• Ciertos medicamentos (p. ej., corticosteroides)
• Ejercicio
• Afecciones inflamatorias (p. ej., artritis y enfermedad intestinal)
• Leucemia
• Embarazo
• Fumar
• Estrés
• Daño tisular
• Tumores en la médula ósea

¿Cómo prepararse para un conteo de glóbulos blancos?

Primero, tiene que programar una cita con su médico para obtener una solicitud de prueba y luego agendar una cita con el laboratorio para la extracción de sangre. Ciertos medicamentos pueden reducir o aumentar su conteo de glóbulos blancos, así que informe a su médico si está bajo medicación. Algunos de los medicamentos que pueden interferir con los resultados de su conteo de glóbulos blancos son los siguientes:

• Antibióticos
• Anticonvulsivos
• Antihistamínicos
• Quimioterapia
• Clozapina
• Corticosteroides
• Diuréticos
• Heparina
• Quinidina
• Sulfamidas

Consideraciones finales

Si los resultados de sus pruebas de laboratorio muestran que tiene un conteo de glóbulos blancos bajo o alto, su médico puede recomendar un plan de tratamiento y también puede volver a revisar sus glóbulos blancos de vez en cuando. Pero si sus glóbulos blancos están dentro del rango normal, ¡genial! Solo siga haciendo cosas que pueden ayudarlo a mejorar su sistema inmunitario y mantenerse saludable, como comer frutas y verduras, dormir lo suficiente, limitar su consumo de azúcar, hacer ejercicio regularmente, controlar sus niveles de estrés y mantenerse hidratado. ¡Qué tenga un excelente día!

Fuentes:
Instituto Nacional del Cáncer (NCI)
Healthline